IDENTIDAD CATÓLICA |
LUSTIGER
¿EL PRÓXIMO PAPA JUDÍO ANACLETO III?
Lustiger y Sitruk hablando
cordialmente en yiddish el 15 de mayo de 2001 cuando el Gran Rabino de Francia
recibió la Legión de Honor (¿?)
No es la primera vez en la que la Iglesia ha debido enfrentarse a una ofensiva tan radical y profunda. Pero probablemente nunca ha estado tan degenerada en el juicio y en el sentir del clero y del pueblo al mismo tiempo. Muchos no entienden que aunque sólo quedara un fiel sobre la Tierra para mantener la llama del Espíritu Santo ahí estaría la Iglesia. Pero hemos olvidado la historia y no entendemos ya ni los Evangelios ni los escritos de los Santos Padres y los Concilios. Los adaptamos a esta época degenerada o sencillamente los olvidamos.
El
pueblo cegado por el Mundo cree que la historia de la Iglesia es la que dice
el Poder y como fuente citan el cine. No llegan a comprender, ciegos de
lujuria y de codicia, que aunque miles de papas, obispos y sacerdotes hubieran
pecado hasta el límite, no afectaría a la verdad sobrenatural que sólo
perciben los que tienen el don de una fe recta.
En
el siglo XII, un criptojudío de la riquísima familia de usureros judíos
Pierleoni, afincados en Roma, tuvo la osadía de conseguir un cardenalato y
mediante el oro y el puñal conseguir el papado, convirtiéndose en 1130 en
otro payaso, Anacleto II. Una vez solucionado el problema pasó a engrosar la
lista de los antipapas, siervos destacados del Anticristo. La Iglesia pudo
entonces enfrentarse a este siervo del Infierno con la ayuda de San Bernardo y
del rey de Francia.
La
verdad es que si tras la muerte del Papa Juan Pablo II, decidieran poner a
cualquier otro tendríamos la certeza de que será su sicario. El hecho de que
puedan colocar a un judío público como Papa sería cuestión de burla.
Quedan
lejanos los tiempos en que el Arzobispo de París, Monseñor Alfred
Braudillart, declarara en 1941 la lucha de Europa contra el bolchevismo ateo y
judío como una Cruzada en defensa de la Cristiandad. ¡Qué contraste y qué
esperpento en la actualidad!
Y
así tenemos a este cómico cardenal “Cómico”, defensor del blasfemo,
genocida y sacrílego “estado” de Israel, descarado protector del
sionismo, guardián de la censura eclesiástica para todo aquel que ose
escandalizarse por la situación de la iglesia, campeón de cualquier
disparate doctrinal o extravagancia litúrgica...
No
lo necesitan, insisto, tal es el control que tienen sobre el Mundo, pero que
amargo sería para la Iglesia de Cristo. Pero si el próximo antipapa fuera el
señor “Cómico” nos espera un “espectáculo” sin igual en la
Historia.
Estemos
atentos a los próximos meses o años.
Existe
una palabra hebrea “chuzpah” que designa el atrevimiento, la osadía,
la desvergüenza. Se pone como ejemplo el de aquel niño que mató a sus
padres y fue a la sinagoga a exigir la ayuda por haberse quedado huérfano.
Quedan
pendientes varias ofensivas más:
-
la de los pederastas y sodomitas que se lleva a cabo ahora (en la que se aúna
la acción de los perros infiltrados en un clero amorfo, blando y feminoide
salvo un resto viril, con la orgía de noticias de los medios en manos de los
asesinos de Dios)
-
la lucha sorprendente por el sacerdocio femenino y por acabar con el voto de
celibato (alegando que si existen casos de pederastia y homosexualidad es como
resultado directo del celibato, ignorando que en la sociedad actual el
matrimonio no supone un freno para el adulterio, la degeneración sexual o la
violación).
-
la de la alteración de la misma Palabra de Dios (se recortaran textos incómodos
alegando que son interpolaciones posteriores o mil cosas más)
-
la presencia del Tercer Mundo, convirtiendo la liturgia en una danza africana
o cualquier otra barbaridad.
El cardenal Aaron Lustiger (¿futuro Anacleto III?) abrazado con el rabino Rene-Samuel Sirat en la conmemoración y lectura en 1998 de la declaración conciliar “Nostra Aetate” en la que el Vaticano se arrodillaba ante la Sinagoga de Satanás. A la derecha con el embajador israelí Schmuel Sisso.
Nuestro admirado San Bernardo se opuso con fuerza contra aquél asalto
de la Sinagoga de Satanás y consiguió expulsar al sucesor del antipapa
Anacleto II. ¿Quién podrá enfrentarse hoy a este “Anacleto III” para
defender a la Iglesia de Cristo tan maltrecha y humillada?
Aquellos que todavía sienten amor por Cristo de forma ordenada y fiel
a la Tradición deben prepararse para una travesía en el desierto, donde la
oración y las lecturas deben formar la columna vertebral de una fe fuerte y
decidida.
Sólo
el Padre sabe lo que nos deparará el fututo. Perseveremos contra el Mundo:
“Lot
se salva en Sodoma y Adán se pierde en el Paraíso”.
San
Juan Crisóstomo.